domingo, 24 de abril de 2016

¿LAS PERSONAS ESPIRITUALES TIENEN CRISIS NERVIOSAS?



Recientemente, me preguntó mi hija Daniela, " ¿Las personas espirituales tienen crisis nerviosas?".
La razón era que ella estaba pasando por un momento muy difícil y le surgió el inevitable pensamiento de que mientras trabajamos en nuestro crecimiento, en nuestra evolución, en el procesar la negatividad, en inspirar a otros y en generar positividad, "no deberíamos" caer en situaciones emocionales, mentales, físicas ni energéticas tan difíciles.
He visto a grandes maestros espirituales que son amorosos e inspiradores, caer en total desesperación, en alcoholismo, en intentos de suicidio, enfermarse seriamente, o atacar verbal, emocional y a veces físicamente a los que los rodean. Por supuesto, para los estudiantes, amigos y seguidores, el comportamiento abusivo se presenta como un gran shock. Y con razón. Nadie tiene que soportar abusos por parte de nadie. Pero la pregunta aquí es, ¿por qué sucede esto?
Unos días atrás, había un gran ritual en la Reserva Makah en honor a un equipo de adolescentes que ganaron un campeonato de baloncesto estatal. Después del ritual, algunos de los espíritus que habían sido invocados, se quedaron alrededor. Psíquicamente fue como una especie de pesadilla. El ritual comenzó, se realizó y no se concluyó. Las energías y espíritus no fueron despedidos. El pueblo quedó repentinamente muy lleno. Y los espíritus y seres que se quedaron no eran de una vibración particular, ya que todo el mundo fue invitado a participar, y así todo el mundo vino. El ruido psíquico se puso super mal y empecé a tener dificultades para manejarlo. De hecho, puedo decir que la semana pasada ha sido una especie de pesadilla.

Un espíritu, en particular, insistió en que fuésemos a una ubicación muy específica por la carretera principal, para sentarnos y ver algo allí. Era amable, bien educado y tenía una super agradable energía. Así que dijimos OK, lo haremos.
Cuando llegamos allí, le pregunté por qué tuvimos que ir sentarnos allí y estar tranquilos.
Esto es lo que dijo:
"Antes del cambio, todos podíamos oír a la Tierra, a cada uno, al viento, a los animales, a los árboles y a las plantas, a los peces, al mar y cualquier otro ser viviente en todos los mundos (dimensiones).
Después del cambio, nuestros oídos dejaron de funcionar. y todo lo que podíamos oír eran nuestros propios pensamientos. Algunas personas podían escuchar un poco, pero la mayoría no pudo. Los que podían oír, necesitaron estar tranquilos, sentarse y escuchar durante muchas horas o días, a veces semanas, a veces meses, y quedarse muy, muy quietos. De esta manera tal vez podrían volver a oír. Y, cuando lo lograban, llevaban lo que escuchaban de nuevo a su pueblo".
Entonces, no estaban en su pueblo? pregunté, Mirando alrededor a los coches y personas cercanas.
"No. Es muy difícil estar silencioso, incluso cuando estás solo, y si hay otras personas presentes, hacen mucho ruido, quieren cosas, tienen demandas, y quieren hablar. Tienes que alejarte de la gente para poder oír bien ".
Me di cuenta de que tenía una sonaja, que estaba movía delante de él. Y él cantaba suavemente o
hacía tonos con su voz.
"La sonaja es para alejar a nuestros pensamientos, y a los pensamientos de otras personas o " voces demoníacas " también. La canción es la melodía que comenzamos a escuchar, la hacemos más fuerte por lo que ahogue a otros ruidos y pensamientos."
Anoche pasamos por la ubicación en la que él quería que nos sentáramos, y él todavía estaba allí.
Sentado en la hierba, envuelto en una manta, la sonaja en su regazo, mirando hacia la ubicación que quería que observáramos.
Esto es, por supuesto, una experiencia subjetiva y una conversación subjetiva. Sucedió en los ojos y los oídos de mi mente, y para mí no es diferente a tener una conversación con otro ser humano. Pero, si ayuda, piensen en ella como en una ensoñación exploratoria.
La idea de aislarnos para hacer el trabajo espiritual es universal. Todas las religiones, todas las culturas, tendrán sus adeptos espirituales, ya sea en grupos aislados lejos de los pueblos y ciudades, o aislados dentro de las ciudades y pueblos con enormes muros infranqueables. La mayoría de los chamanes pasan tiempo a solas en las montañas, bosques y otras zonas aisladas. La mayoría de los monasterios y conventos están lejos de la civilización.
Ahora, ¿qué tiene todo esto que ver con las crisis nerviosas?
Bueno, no es una coincidencia que los adeptos y trabajadores religiosos y espirituales se aíslen. Lo hacen para preservar su propia cordura y para protección. Nosotros, por otra parte, entramos profundamente en nuestra propio proceso expansión de la conciencia y de ascensión sin el lujo de aislamiento y el apoyo que otros te pueden dar sosteniendo el espacio (vibración de alta frecuencia energética en nuestro entorno inmediato). En cambio, estamos rodeados por dramas, exigencias emocionales, exigencias físicas, trabajo, hijos, cónyuges, proyectos, vecinos, noticias, guerras y otras tragedias, y las cosas de otra gente. Un montón de cosas de las personas. Tenemos que "preocuparnos" por llegar a fin de mes, pagar la renta, sostener nuestras relaciones, costearnos el transporte hacia y desde el trabajo... la lista es interminable.
Esto no es algo que se haya hecho antes. No hay ningún otro momento de la historia registrada donde millones de personas comenzaron a trabajar en su crecimiento espiritual, al mismo tiempo que viven y trabajan en el medio ambiente mundano. Sí, las personas desde hace miles de años han llegado a ser "religiosos" siguiendo un estilo de vida religioso muy estricto, pero eso no es lo mismo que ser iluminado o trabajar hacia el despertar. En la primera entregamos nuestro poder, en la segunda asumimos nuestro poder. En la primera permitimos que otras personas más espirituales nos den información y "bendiciones", en la última vamos a nuestro interior y encontramos la información y las "bendiciones" por nosotros mismos. Convertirse en adeptos espirituales en un ambiente mundana crea una gran tensión de tira y afloje.
Somos lo suficientemente fuertes como para hacerlo. Pero a veces nos empujan con tanta fuerza que perdemos estabilidad y caemos. Por lo tanto, ¿qué hacemos en esas situaciones?

En primer lugar, nos damos cuenta que (como dice el viejo proverbio budista) "todos los inviernos se transforman en primavera". Pasará. En segundo lugar, tenemos que comenzar a observar y hacer cambios en nuestro estilo de vida y las exigencias que nos imponemos. En tercer lugar, tenemos que construir límites fuertes. Ser asertivos sobre qué tipo de interacciones permitimos en nuestra vida.
Ser amorosos y atentos con nuestro ser y con nuestro cuerpo.
Y si mientras lees este artículo has identificado señales de alerta en tu propia vida, encuentra tiempo para aislarte de tu rutina diaria. Si no puedes permitirte un retiro espiritual (cada pocos meses), entonces, ciertamente, resérvate tiempo en la naturaleza, o en la habitación donde tienes tu altar, donde no serás molestado un par de días al mes.
A veces reaccionamos con tanta fuerza a la Fuerza de tracción y que nos aislamos por completo de todo el mundo que nos rodea durante semanas, meses o incluso años. Al no saber cómo dar un paso para volver a la sociedad, las relaciones o interacciones, o incluso si eso es una buena idea Finalmente, una vez que sanamos de todas nuestras interacciones anteriores (Hay muchas herramientas y artículos en ascension101.com para ayudar a hacer precisamente eso), podemos reincorporarnos a la vida mundana con un mayor sentido de uno mismo, energía, límites y sabiendo en qué tipo de relaciones y cocreaciones queremos involucrarnos.
Si sientes que está cayendo en depresión, o una crisis nerviosa, evita el alcohol y las drogas que alteran la conciencia, aunque tentador, esto hará que las cosas empeoren a nivel energético (se abrirá las puertas a las influencias energéticas negativas).
Sea amoroso contigo, observa este fenómeno, entiende por qué sucede, y también darte cuenta de que es frecuente, y que podemos hacer algo al respecto.
Y una de las cosas que podemos hacer de inmediato es no tratarnos mal, o sentir que hemos fallado porque hemos caído en el drama, baja vibración o el sufrimiento por un tiempo.

Inelia Benz
En GozoLuzAmor

Inelia y equipo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario